El que sacia de bien tu boca de modo que te rejuvenezcas como el águila” (Sal. 103:5).
DIOS SACIA TU BOCA; es decir, satisface tu necesidad si tienes hambre y sed. Esto es más que sentirse bien mucho mas satisfecho, esto es estar bien. Si estás enfermo no te conformes a seguir enfermo. Si eres pobre no te resignes a la pobreza tu prospera y tendras cosas valiosas como si careses de amor jesus de proveera mucho amor, careses de amigos jesus te dara miles. Si te encuentras sólo, no te acostumbres a la soledad que jesus te rodeara de mucha gente que te ama. Si estás atado a vicios y pecados, no amoldes tu fe a ellos. Grita: “¡Aquí, Señor, aquí es donde necesito satisfacción!” Se como los pollos de las águilas con los picos abiertos clamando por comida con chillidos insoportables.
Hay personas que insisten en comer comida que no les hace bien y no les nutre y en su cuerpo no les satisface su hambre hoy te invito a que no comas cualquier cosa solo para cubrir apariencias llena tu vida con un banquete espiritual.
LA EVIDENCIA DE ESTAR SACIADO DEL CIELO ES LA RENOVACIÓN ESPIRITUAL Una boca saciada sacia a otros. La boca llena de bien habla el bien: “Como de sebo y de gordura se saciará mi alma; mi boca te alabará con labios de júbilo” (Sal. 63:5).
domingo, 14 de diciembre de 2008
Comida Celestial
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